La increíble velocidad de la IA generativa para hundirse en nuestra vida cotidiana llegó como un tsunami. A una tasa de crecimiento récord, similar a una pandemia tecnológica, los usuarios registrados de ChatGPT de OpenAI alcanzaron 1 millón en 5 días y 100 millones en 2 meses para convertirse en la aplicación de Internet para consumidores de adopción más rápida.
Esto es aún más impresionante considerando que ChatGPT de OpenAI, aunque llega a 162 países, no permite que se registren usuarios de China continental, Hong Kong, Irán, Rusia y partes de África. China continental y Hong Kong representan una quinta parte de la población mundial. Esto no impidió que el frenesí de ChatGPT llegara a las costas chinas, ya que su maravilla ha encabezado casi todas las conversaciones, publicaciones de WeChat y resultados de búsqueda.
Cuando se calme el polvo tras la novedad de las conversaciones que la población masiva tiene ahora con su AI ChatGPT, las implicaciones para el mundo empresarial podrían ser aún mayores. Los informes financieros que miden el pulso del mercado podrían verse afectados directamente por el tsunami de la IA, impactando a los actores de las empresas, los reguladores y el “talento humano” del ecosistema.